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ME DESPERTÓ EL VIENTO PERO ERAN MÁQUINAS
Me despertó el viento pero eran máquinas
Salir a la galería en remera
buscar donde poner la mirada
exaltar algo por su singularidad y belleza
o en el extremo lo anómalo
de la belleza:
el atardecer que se escurre en la oscuridad
y su velocidad lateral que no cesa
de combatirla
cuando se aferra a otra luz
la de los ojos
Para revertir el proceso
o para dejarlo modificado
una vez que nos hayamos ido
Su lógica argumentativa es un misterio
que crece
bajo la sombra húmeda
de los árboles y las vecinas
